Noticias en prensa sobre la sentencia del Tribunal Supremo en el ERE en la UPM: http://www.lavanguardia.com/local/madrid/20170628/423746855457/el-supremo-declara-ajustado-a-derecho-el-despido-de-66-trabajadores-de-la-upm.html?utm_campaign=botones_sociales&utm_source=whatsapp&utm_medium=social&utm_campaign=botones_sociales&utm_source=whatsapp&utm_medium=social
Curioso que el propio portal del Tribunal Supremo no publique la noticia, pero de alguna manera sí que se le ha transmitido a la Prensa y...
Ha resultado que el primer despido colectivo en una universidad pública española es ajustado a derecho. Por lo tanto la estrategia diseñada por la UPM en agosto de 2014, después de la primera sentencia de nulidad por los despidos ilegales de marzo 2013, ha triunfado. El batiburrillo de causas ahora económicas, ahora organizativas, ha pasado el filtro del Alto Tribunal, que no ve nada raro en que una institución pública pueda decidir amortizar plazas por una causa económica y años después ejecute un ERE por una causa organizativa: que esas plazas ya no están en la RPT. Yo me lo guiso, yo me lo como...Tengo la potestad para amortizar plazas y ahora también la excusa perfecta para ejecutar un despido colectivo única y exclusivamente contra las personas que ocupaban las plazas que he eliminado unilateralmente. Perfecto.
No sabemos de que manera el Tribunal ha constatado esa "reorganización de los servicios en la UPM" a la que se alude en la nota de prensa. Habrá que esperar a leer la totalidad de la sentencia, y sacar entonces conclusiones.
Pero, en principio la UPM ha logrado sus objetivos, desembarazarse a toda costa de unos trabajadores que molestaban, y que toda siga igual, que a muchos les va bien así, y los interinos están para tirarlos por la borda en cuanto venga la primera tormenta. Los "301" fuimos señalados para pagar el pato y no han parado hasta lograrlo. Con el rector conde, artífice del ERE, y posteriormente con el rector Cisneros, que nunca ha demostrado el más mínimo interés en evitarlo y reparar los daños.
A la UPM le queda el dudoso honor de ser la primera universidad en ejecutar un ERE y haber abierto camino a todos los que van a ir cayendo próximamente, porque tenemos que aprender que el trabajo digno no es ninguna prioridad. La orquesta del Titánic puede seguir tocando, que no pasa nada...
En lo personal, me voy con la cabeza bien alta de una UPM en la cual sé que aporté mucho y buen trabajo durante el tiempo que me permitieron hacerlo. Tengo la satisfacción del deber cumplido.
Tan solo un poco de amargura por el futuro incierto que se nos abre a los luchadores de la Asamblea de los "301". Lo hemos intentado lo mejor que hemos sabido, y hubo algunas buenas opciones en momentos puntuales para que el resultado hubiera sido bien distinto. Pero demasiados dentro de la UPM nos han olvidado desde el primer día en marzo de 2013, otros nos han abandonado cuando ya no interesábamos, algunos nos han traicionado (a los trabajadores en general) y pocos, muy poquitos, nos han apoyado con sinceridad.
Un saludo para quienes tuvieron el corazón y el coraje de apoyarnos contra la maquinaria UPM, y sobre todo para mis compañeros 301. Que tengais mucha suerte.
